jueves, 30 de abril de 2009

Google, el buscador de influenza

Como podrán imaginar, en estos días en México (y al parecer en muchos periódicos del mundo) el único tema de conversación es la influenza H1N1 (erróneamente llamada influenza porcina). Así que eventualmente yo también terminé por caer en el cliché y hablar del asunto. Sólo que a mi modo.

Hace un rato me topé con un artículo muy interesante que quiero compartir con ustedes. Google pudo haber detectado el brote actual de influenza mucho antes de que los médicos se enteraran. ¿Cómo? Analizando las tendencias de búsquedas que la gente lleva a cabo en su sitio web.

Cuando nos enfermamos, a veces hacemos búsquedas en Google buscando alguna receta casera, o más información sobre nuestros síntomas. Estas búsquedas las llevamos a cabo tecleando palabras claves como “fiebre”, “tos”, “flujo nasal”, etc. Cuando surge una epidemia repentina, o un brote, muchas personas realizan búsquedas con palabras similares, en un período de tiempo muy cercano. Lo único que falta es que alguien tenga acceso a las estadísticas de Google para encontrar estas tendencias. Con ustedes, Google Flu Trends.

Desde hace ya algunos años, la gente de Google en Estados Unidos montó “monitores de búsqueda” que detectan el aumento repentino de búsquedas con ciertas combinaciones de palabras (síntomas), como una manera de detección temprana de brotes de influenza. Se dieron cuenta que la tendencia en búsquedas era muy similar a los casos reales detectados por los doctores, e incluso publicaron un artículo en la revista Nature.

El problema es que Google Flu Trends hasta hoy sólo había estado funcionando para Estados Unidos, y cuando las tendencias de búsqueda de influenza en México se dispararon (antes de que los medios hicieran revuelo) no había ningún ser humano del otro lado del monitor para dar la alerta.

Esperemos que en próximas ocasiones ya le pongan caso a las tendencias no sólo en Estados Unidos sino en todo el mundo. Por lo pronto, si entran a la página de Tendencias de Influenza en México se darán cuenta la distribución geográfica de las mismas en toda la República. Nada que ver con lo que las cifras oficiales mencionan en las noticias.

Como nota final, Google ofrece análisis de tendencias de búsqueda, no sólo para influenza, sino para cualquier tema que el público solicite. Visiten Google Insights para jugar un rato con esta herramienta.

tapabocas

Saludos desde mi trinchera,
Emmanuel

jueves, 2 de abril de 2009

Los Mapas Mentales, del papel al monitor

Blog - Mapas Mentales

Hace poco me topé con un concepto que me pareció muy interesante y que me inspiró a escribir esta entrada. Me refiero a los mapas mentales.

El nombre es muy llamativo, y aunque de entrada es un nombre muy pretencioso (¿cómo mapeas tu mente?) realmente es un concepto muy simple y a la vez muy interesante.

Un mapa mental no es otra cosa que un diagrama gráfico que representa ideas unidas y organizadas sobre un concepto central. Alrededor de esta idea principal, se van agregando temas a manera de ramas o nodos. A su vez, cada rama puede tener ideas derivadas de la misma.

Esta forma de representación mental ofrece varias ventajas por encima de la prosa. De entrada, permite un flujo de ideas mucho más flexible y dinámico que cuando escribimos una lista de ideas con texto, ya que no nos obliga a preocuparnos por un orden específico de ideas, o un jerarquización linear. Además, los mapas mentales activan zonas cerebrales distintas a las que usamos al leer o escribir solamente palabras, y la representación gráfica de ideas facilita la memorización y organización mental. De hecho, muchas de las mnemotecnias se basan en representaciones gráficas de ideas.

Cabe aclarar que los mapas mentales no son un nuevo invento, de hecho Aristóteles ya los usaba. Incluso tal vez hemos usado mapas mentales en algún momento sin darnos cuenta. Cuando nos acercamos a un pizarrón a explicar algún proceso o concepto, y comenzamos a dibujar círculos alrededor de una idea principal, estamos haciendo mapas mentales.

El problema es que hasta hace poco tiempo no había una buena herramienta computacional para hacer mapas mentales. Tanto así, que era más práctico tomar lápiz y papel para esquematizar o diagramar rápidamente. Creo que con el software de mapeo mental por fin la tecnología ha madurado lo suficiente como para superar al papel y lápiz.

Hasta hace poco, usar una computadora para ilustrar un mapa mental era un proceso muy lento que implicaba utilizar herramientas gráficas como Photoshop o Illustrator, o en el mejor de los casos, herramientas de diagramación como Visio. Aun así, dado que estos programas están enfocados en que todo se vea bien, era mucho más rápido pintar los mapas mentales en papel, dejando a un lado la estética del diagrama.

Derivado de esta carencia surgen los programas especializados en diagramación de mapas mentales, que son mucho más ágiles y simples de usar, tan sencillo como introducir texto. Actualmente hay varias opciones en el mercado. Quizás el software más popular a la venta es MindManager, pero también hay programas gratuitos Open-Source, de los que recomiendo el FreeMind.

Personalmente, he encontrado tan útiles estas herramientas, que me pregunto por qué no viene un software de mapeo mental como parte de las suites de oficina, complementando los procesadores de texto, hojas de cálculo y presentadores de diapositivas. También entiendo que haya gente que luego de usar estos programas decida regresarse al lápiz y papel. Sea cual fuere la opción que elijan, cuando comiencen a usar los mapas mentales, verán que son muy útiles para atacar ciertos problemas de organización, análisis, o investigación. Fomentan tu creatividad y facilitan tus procesos mentales. Simplifican tu vida. Tanto, que pueden volverse evangelizadores como yo. Lo confieso, soy fan.