Videojuegos controlados con el pensamiento, a la venta para Navidad

Continuando con los artículos sobre interfaces cerebrales, ahora les traigo esta noticia de la revista PC Authority en Australia. Es sobre la empresa Emotiv, que lleva 6 años desarrollando el dispositivo EPOC y que saldrá a la venta el 21 de diciembre. La empresa promete que este aparato permitirá jugar videojuegos con un casco que “lee” el pensamiento. En mi opinión, suena mejor de lo que realmente es.

En realidad, el casco utiliza la misma tecnología que se ha usado desde hace varias décadas para hacer electroencefalogramas (EEG). Cuando pensamos en algo, nuestra actividad cerebral genera impulsos eléctricos internos. El casco EPOC detecta esos impulsos y los procesa, traduciéndolos en movimientos dentro del juego.

No sólo eso, sino que, potencialmente, un videojuego podría detectar cuando el jugador está relajado, aburrido, emocionado, atemorizado, y consecuentemente, alterar lo que el juego le presenta para mejorar su experiencia.

El único problema es que, a pesar de todo lo que prometen sus creadores, las demostraciones en público de este aparatito no han sido muy exitosas. Los juegos mostrados tienen respuestas lentas a los usuarios. Si un producto sale prematuramente al mercado, puede ocasionar una impresión tan mala que podría perjudicar la confianza de los compradores en otras ofertas futuras que pudieran tener mayor madurez. Por otro lado, aunque no sea perfecto, si es lo suficientemente bueno como para apantallar al respetable, puede ser un catalizador para acelerar la inversión en este campo.

El artículo también menciona otros usos que podría dárseles a los cascos EPOC. Por ejemplo, James Cameron los usó en proyecciones piloto de su nueva película, Avatar. El director puso un casco EPOC en cada asistente a la proyección. De esta manera, el director pudo registrar qué escenas causaban mayor impacto en su audiencia, y así ajustar la edición final para lograr el efecto deseado.

Otros usos que se están explorando son para apoyo a personas con discapacidades motrices. Imaginen a Stephen Hawking moviendo su silla eléctrica y hablando sin tener que usar el popotito, sino usando el casco.

El resultado final de esta propuesta está por definirse en las próximas semanas (si es que Emotiv cumple su promesa de salir al mercado antes de Navidad), y eso podría definir el futuro comercial de este tipo de dispositivos, pues además de Emotiv, hay otras compañías investigando y desarrollando prototipos similares.

Actualización (28/01/2010): A casi dos meses de que publiqué esta entrada, la compañía Emotiv por fin puso a la venta el tan esperado videojuego telepático, sin mucho bombo y platillo. La reseña del sitio web Joystiq critica que no es lo suficientemente efectivo “leyendo” pensamientos como para que valga la pena comprarlo, y más bien lo califica de “prototipo experimental frustrante”. Aunque esto sea cierto (y no lo dudo), no hay que olvidar que el primer vuelo del avión de los hermanos Wright recorrió apenas 260 metros. Este dispositivo podría ser el pionero de una nueva forma de interactuar no sólo con videojuegos, sino con miles de electrónicos. Por otro lado, ¿US$300 por un juguete que no funciona?